5
septiembre 2013 (por Hollywood)
Decidimos
hacer las maletas, abandonar Darwin y cambiar de aires embarcándonos en una
apasionante aventura atravesando gran parte del interior de Australia para
llegar hasta Brisbane en la costa este.
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Carol tuvo tiempo de compartir su pasión por el yoga. |
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Darwin en hora punta |
Muchas
compañías de alquiler ofrecen la posibilidad de recolocar sus vehículos de una
ciudad a otra, así que por los siguientes diez días nos mudamos a una casa
rodante.
El
Parque Nacional de LITCHFIELD es el primer lugar que nos avanza que este viaje
por carretera nos va a deparar lugares inolvidables y paisajes de ensueño.
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Estas formaciones, lo creas o no, son nidos de termitas. |
Cada día nuestro diminuto hogar nos planteaba uno o varios obstáculos a superar. Si no era la manguera del agua, era la conexión de la luz. Por eso, para quien se tiente por hacer un viaje similar, el cual recomendamos plenamente, es conveniente que le muestren con detalle y le expliquen el funcionamiento de todo para evitar sorpresas, en especial si eres novat@ como nosotros.
También aconsejamos empezar cada jornada bien temprano, ya que para las seis de la tarde ha oscurecido, algunos campings cierran temprano y conducir por carreteras con poca luz con la presencia de canguros y ganado es bastante arriesgado.
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"Cangureando" |
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Atardeceres de película |
Viajamos
hacia el sur por el inmenso Territorio Norte, carreteras solitarias que se pierden en el
horizonte, camiones gigantes, caminos de arena rojiza, cielos que parecen pintados… todo muy auténtico.
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Proyecto Vivi deja huella. |
Pueblos de 316
habitantes, repostar en una gasolinera y la siguiente más cercana encontrarse a
260 kms, estaciones de ganado con extensiones de 50 x 60 km… son algunas
curiosidades que nos han llamado la atención en nuestro camino.
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Adaptándose a las circunstancias para continuar con su práctica diaria |
Al
cruzar al estado de Queensland adelantamos nuestros relojes treinta minutos y
hacemos noche en un camping en la ciudad minera de Mount Isa.
Incluso
pasamos por Walkabout Creek, el bar favorito de Mick “Cocodrilo Dundee”.
Pero
el pueblo más entrañable y mágico que nos encontramos, sin duda fue WINTON. Está
claro que la evolución y el avance al mundo moderno pasó de largo por este rincón
perdido en mitad de la nada.
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Las avestruces respetan el límite de velocidad, pero van por el carril contrario... serán extranjeras. |
De repente nos encontramos en el lugar más
tranquilo y acogedor que recordamos en mucho tiempo. Caminamos por su calle
principal disfrutando de un silencio y una paz fascinante. Estamos convencidos que este escondite
anclado en el pasado sirvió de inspiración para recrear Radiador Springs
de Cars.
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¡Hasta tienen a Mate! |
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Practicando bajo las estrellas, a la luz de la luna. Yogis, no os preocupéis que no era luna llena. |
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Los
desiertos van desapareciendo a medida que nos acercamos a la costa, donde el
paisaje empieza a ser más montañoso, pero igual de espléndido.
Finalmente
llegamos a BRISBANE con mucho cansancio tras casi 4000 kms, pero con una gran
sonrisa en el rostro por esta experiencia inolvidable que acabamos de vivir.
“Lo menos frecuente en este mundo es vivir.
La mayoría de la gente existe, eso es todo.”
-- Oscar
Wilde --